Con la llegada a la presidencia de la República de Andrés Manuel López Obrador, que se he adjudicado la victoria en las elecciones presidenciales de México, la industria de los casinos se enfrenta a un futuro incierto. En un breve discurso en la Ciudad de México, López Obrador pidió la reconciliación después de una dura campaña electoral y prometió un cambio profundo que respete la ley y el orden constitucional. Así lo expresó el nuevo legislador:
Confieso que tengo una ambición legítima: quiero pasar a la historia como un buen presidente de México.
Aún no está claro exactamente dónde se encuentra López Obrador para legalizar, regular o expandir el sector del juego en nuestra nación, pero ya todos los actores miran al nuevo presidente para conocer cuáles serán sus intenciones.
Según informes recientes, México tiene un mercado de juegos de azar de 10.000 millones de dólares anuales, lo que lo convierte en el segundo más grande del mercado Latinoamericano por detrás de Argentina. El país también tiene aproximadamente 320 casinos y espacio para otros 300 según la información aportada por Francisco Vidal, director de operaciones y director de operaciones de Sortis y Golden Lion Casinos, al portal web Casino Review.
Sin embargo, el presidente electo de México ya se opuso hace varios años a una expansión de la industria de los casinos en el país, tal y como denotan unas declaraciones realizadas por él mismo en el año 2005.
Se trata de impulsar el turismo, no hay necesidad de permitir los casinos. La decisión de no legislar para los casinos «en lugar de perjudicarnos, nos beneficia.
Esta opinión se basó en unos informes de López Obrador que datan de 2005, cuando se le preguntó acerca de la expansión de la industria de los casinos para crear empleos e impulsar la economía.
En ese momento, de acuerdo con el periódico Yucatan Times, el actual presidente dijo que antes de la elección, México estaba en el proceso de revisar un nuevo proyecto de ley de la Ley Federal de Juegos. De aprobarse, México habría reconocido oficialmente a la industria del juego y tomaría medidas para crear un nuevo regulador que monitoreara la actividad.
La nueva ley también le permitiría a México imponer un impuesto a las apuestas y los operadores tendrían que implementar medidas contra el lavado de dinero, unos de los principales problemas asociados a este tipo de negocios. Queda por ver si ese proyecto de ley continuará siendo debatido en la legislatura.
López Obrador, que hizo campaña contra la espiral de corrupción y violencia que sacude a nuestra nación, parece haber ganado las elecciones por una mayoría de entre 53% y 53.8% de los votos. Las encuestas de salida mostraron que su partido está preparado para ocupar un gran número de escaños en el Senado y la cámara baja, y posiblemente mayorías absolutas en ambos, lo que le permitiría al partido controlar el destino del proyecto de ley de la Ley Federal del Juego.
Ahora solo queda esperar las decisiones que se tomarán con respecto a un sector que reporta unos grandes beneficios a la economía del país, además de crear miles de puestos de empleo tanto directos como indirectos, algo que es tan positivo como necesario para la salud financiera de la nación.
Sin embargo, también es cierto la gran necesidad que tiene México de actualizar la Ley Federal del Juego y adaptarla a los nuevos tiempos, principalmente en lo que respecta a las apuestas en línea, un segmento del juego en el que aún queda mucho por hacer.
Beneficios de la regulación del Juego en México
Existen innumerables beneficios para los usuarios de estos sitios de juegos de apuestas en línea si se aprueba la reglamentación del sector. Con tantos participantes en este sector, la competencia será feroz para tratar de ganar una mayor participación en el mercado. Esto significa que los nuevos jugadores disfrutarán de fantásticas ofertas y bonus. En el pasado, con el sector no regulado, muchos de estos sitios que prometían grandes recompensas al registrarse no eran nada fiables debido a la falta de regulación.
Así se expresaba al respecto el Director de Operaciones del grupo Big Bola, Emilio Quirós, en el magazine número 12 de AIEJA:
En pocos años el sector ha desarrollado establecimientos que han superado en seguridad, oferta de entretenimiento y servicio a los operados en muchos otros mercados conmuchos años de ventaja. Esto no solo apunta a una industria innovadora, sino a una población exigente y cada vez más conocedora de lo que un casino debe ofrecer. Es labor de todo el sector el traducir esta exigencia de nuestros clientes en acción legislativa que nos de las herramientas para invertir con certeza hacia este fin.
La regulación conducirá inevitablemente a un crecimiento en los ingresos de las principales plataformas reguladas de juegos de apuestas en línea, permitiéndoles inyectar más dinero en sus ofertas y en el negocio en general. Esto mejorará la experiencia para los jugadores también, además de reportar mayores ganancias a las arcas del Estado.
Si se aprueban los cambios, estas compañías necesitan invertir o arriesgan ser eclipsados por otros participantes del mercado, especialmente por empresas extranjeras con experiencia en el sector. Hasta la fecha, la falta de regulación ha significado que muchas operadores de prestigio han evitado a México, pero este no será el caso una vez que la regulación entre en vigencia.